Bailando por el mundo con Mar Aguiló

¡Feliz Cumpleaños!

Mar nace en Palma de Mallorca, donde comienza sus estudios de danza clásica y contemporánea. En 2005 ingresa en la escuela Êcole Atelier Rudra Bejart del coreógrafo Maurice Béjart, en Lausanne, donde finaliza su periodo de formación. En 2007 pasa a formar parte de la CND2, y tres años después se incorpora a la Compañía Nacional de Danza. En estos últimos años se ha empezado a desarrollar como coreógrafa para la propia CND en piezas como For Now in Liquid Days, Afterlove y Arriaga junto a Alosa y Joaquín De Luz.

FANDANGOS-Y-TONADILLAS-PORTADA (ESCENA)

¿Por qué baila Mar Aguiló?

Empecé a bailar con tres años. La danza es el amor de vida, a pesar de haber pasado por momentos muy difíciles siempre ha prevalecido ese amor. Cuando bailo consigo conectar con las emociones más profundas.

 

En 2018 te graduaste en el Conservatorio Superior de Danza María de Ávila, presentando como trabajo final la creación de la pieza de danza contemporánea Océano mujer. Cuéntanos un poco de la pieza.

Cuando cumplí treinta años me encontraba bastante perdida en lo personal y en lo profesional. Descubrí la danza butoh y me hizo encontrar una manera de bailar mucho más verdadera. Una danza que no tenía que ver con la técnica o con la búsqueda de la belleza o la excelencia. Sentí que necesitaba un cambio, una transformación; quería liberarme de muchos paradigmas de la danza más académica y del estereotipo de la bailarina.

 

¿Cómo fue el proceso de creación?

El primer paso fue comenzar a desarrollar un discurso artístico propio relacionando el océano, origen de la vida y herencia genética, con la mujer. De esta manera busqué poder aprovechar su valor simbólico y utilizarlo como escenario en diversas metáforas y comparaciones. Desde una perspectiva femenina quise representar a una mujer real y libre, así como normalizar el cuerpo y el desnudo de la mujer. Durante la creación observé, que gracias a la danza, era posible romper con esa idea de cuerpo-objeto de la mujer. La sensualidad de los movimientos se genera por la necesidad de conectar con la naturaleza y eso refuerza la tendencia de un feminismo actual, donde la mujer acepta su femineidad y su poder maternal para crear un cuerpo históricamente nuevo.

¿Qué representa para ti esta pieza?

La creación de este solo significó el inicio de un lenguaje propio, desarrollando un discurso artístico a través de una danza enfocada al empoderamiento de la mujer e investigando en las diferentes formas de entender y vivir el cuerpo, la psicología, las emociones y su movimiento.

 

Desde Jóvenes creadores CND, has tenido participaciones en espacios como el estreno en el Museo Guggenheim de Bilbao, “Francine”, Hotel Room para el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza y Afterlove para el Día Internacional de la Música. ¿Crees qué estos espacios te han hecho crecer en tu carrera profesional? ¿Cómo?

La mayoría de esas creaciones fueron encargos así que los espacios siempre fueron mi punto de partida. Bailar en espacios no convencionales donde no existe la cuarta pared, donde no hay magia ni artificio, me ha llevado a desarrollar una forma de interpretar y sentir el movimiento de una forma más honesta. La cercanía con el público es algo muy especial pero también desvela lo frágil que puede ser la danza según el contexto.

 

Has colaborado con artistas de diferentes disciplinas como James Mounfourt, Cortana o Mana. ¿Cómo lo has relacionado con tu profesión?

En el momento que empecé a hacer colaboraciones entendí la importancia de llegar a crear una red de contactos de artistas pertenecientes a otras disciplinas con el fin de ampliar horizontes artísticos

 

¿Qué te has llevado de esas experiencias? ¿Lo repetirías?

Las referencias e inspiraciones en el cine, la fotografía, la pintura o la moda han sido fundamentales para ir generando un universo y discurso artístico propio.

En tu trayectoria ¿cuáles fueron los pasos para pasar de la CND2 o a la CND? ¿cómo ha sido el trabajo con los distintos directores con los que has trabajado?

A pesar de llevar catorce años en la CND tengo la sensación de haber estado en compañías muy diferentes. Los cambios en la dirección y en el elenco han hecho que cada etapa haya sido única y valiosa.

 

Además de seguir formando parte de la CND, eres directora creativa de ELAMOR. ¿Cómo compaginas ambas cosas? ¿Crees qué son complementarias para tu desarrollo profesional?

ELAMOR es una productora creativa de danza que acompaña e impulsa iniciativas artísticas basadas en la investigación coreográfica, de las artes vivas y la performance. Buscamos que nuestros intereses y campos de acción muten, se abran y se multipliquen. Gracias a formar parte de ELAMOR he tenido la oportunidad de ampliar mi conocimiento sobre el sector y de aprender otras formas de abordar la creación artística. Hasta ahora ha sido muy fácil compaginar las dos cosas y sobre todo ha enriquecido mi carrera como bailarina y creadora en la CND.

Como coreógrafa has creado Arriaga junto a Pino Alosa y Joaquín De Luz. ¿Cómo fue esa experiencia?

La creación empezó justo al terminar el confinamiento, fue un momento único y una experiencia inolvidable. Me siento muy agradecida por la oportunidad y la confianza que me dio Joaquín. Durante el proceso creativo en el estudio se creó una atmósfera de trabajo llena de respeto y confianza. Crear para mis maravillosos compañeros fue un auténtico regalo y poder trabajar junto a Joaquín y Pino de una manera tan horizontal, todo un lujo. Nunca olvidaré esa noche de estreno en los Jardines de la Alhambra de Granada donde los bailarines vibraron y disfrutaron juntos de su vuelta a los escenarios.

 

Y ya para terminar. Sí pudieses hablar con tu “yo” del pasado ¿qué le dirías sobre la danza?

Le diría que tuviera paciencia, que disfrutara más… y que me importase menos lo que pensaran los demás de mí.

MAR AGUILÓ – CUERPO DE BAILE CND

Entrevista por: Monse Martinez Zabaleta