Repertorio

Jardín infinito

Nacho Duato

Dedicado a Chéjov en el 150 aniversario de su nacimiento.
En colaboración con el Festival Internacional de Teatro Antón Chéjov de Moscú, con el apoyo del Gobierno de Rusia y del Gobierno de Moscú.

Jardín infinito es un homenaje a Antón P. Chéjov. He tratado de impregnarme de la personalidad de este gran escritor, de cómo vivía y de lo que sentía por sus semejantes y por el mundo que le rodeaba. Jardín infinito no está basado en ninguna de las obras de Chéjov en concreto. No quería que situaciones, alusiones o anécdotas relacionadas con ellas constituyeran la base de mi trabajo, definitivamente abstracto. Me he inspirado en su mundo, en su personalidad y en su obra para extraer una visión particular y personal de todo ello.

  • Estreno absoluto por la Compañía Nacional de Danza: en el Teatro Real, Madrid (España), el 17 de febrero de 2010
Jardin-Infinito-portada

Para la música seleccioné en primer lugar los cuatro himnos de Alfred Schnitke tanto por su belleza intrínseca como por considerarlos afinados en el mismo tono de Chéjov. Pedí al mismo tiempo a Pedro Alcalde y a Sergio Caballero que crearan una música original que arropara estos himnos y que los situase en una arquitectura sonora que englobara el conjunto del ballet. Para ello han realizado un trabajo con palabras y textos extraídos del Cuaderno de Notas de Chéjov acompañado de microcomposiciones no rítmicas para diferentes instrumentos de percusión. La coreografía no utiliza las palabras y los textos de forma literal pero si considerando siempre su extremado valor musical. En su trabajo de estructuración del total han añadido un Himno Sacro de Schnitke para coro a capella, un fragmento de Chaikovski como referencia al compositor que tanto admiraba Chéjov y un pequeño fragmento con sonidos de la naturaleza pero abstraído de todo valor referencial.

El decorado, diseñado por Jaffar Chalabi, puede trasladarnos a un sinfín de escenarios muy diferentes. Podemos estar viendo el skyline moscovita o el paisaje de la estepa. Podemos imaginar tejados de casas o también una montaña. Cuando la estructura se coloca a nivel del suelo, nos permite recortar el espacio y sugerir ambientes más íntimos, como la habitación donde escribía Chéjov o incluso una callejuela de alguno de sus cuentos. Cuando la estructura se eleva y se coloca suspendida a cierta altura, podemos visionar espacios abiertos en la naturaleza, paisajes y bosques. Y sin embargo mantiene siempre el carácter abstracto que siempre ha perseguido esta creación.

Otro médico y escritor, Arthur Schnitzler, (coetaneo de Chéjov) definió el alma humana como una “tierra amplia”. Es esa tierra amplia a la que Chéjov dedicó su vida entera a observar, describir y cultivar con el esmero con el que se cuida un jardín. Su clara visión de la fragilidad y la complejidad de las relaciones humanas ha llegado hasta nosotros gracias a su obra. El título, Jardín Infinito, hace alusión a ello. Además de que considero que la obra de todo gran espíritu es infinita, nunca se acaba y nunca morirá.”

Nacho Duato

Palabras y textos utilizados en Jardín infinito

Cuando empezamos a trabajar con la música para la coreografía dedicada a Antón Chéjov, pensamos en la palabra y la percusión como principales ejes de la paleta sonora que utilizaríamos para componer. Necesitábamos que esa palabra no fuese una historia o una obra teatral, para evitar en todo momento la tentación de la narratividad.

Por eso utilizamos textos y palabras extraídos de su Cuaderno de notas, que, sin caer en la dramaturgia de una obra acabada, nos sumergían en un mundo más personal de Chéjov: el de su cantera.

Era la sonoridad de la palabra lo que nos interesaba: apuntes, esbozos, pinceladas donde el texto es todavía material en bruto. Desde ese mismo lugar la voz tarareará el estribillo de una popular romanza o podrá enumerar los elementos de la taiga rusa.

El ballet empieza con un listado de títulos de las obras de Chéjov. La parte central la componen pequeñas frases o párrafos que el escritor iba anotando, para utilizarlos ocasionalmente en alguna de sus obras y la parte final son palabras sueltas del Cuaderno.

Algunos ejemplos:
Alerce
Serbal
Una fábrica, 1000 obreros. De noche. El sereno golpetea su pequeña tabla. Tanto trabajo, tantos sufrimientos y todo por esos inútiles y despreciables dueños de la fábrica. Una madre estúpida, una gobernanta, una chica… La hija cae enferma, llaman a un profesor de Moscú, pero no viene, envía a un discípulo. El discípulo, de noche, escucha los golpes del sereno y medita. Le hacen pensar en alguien que clava pilotes en la tierra. “¿Pero será posible que toda mi vida tenga que trabajar como estos obreros para personas tan nulas, caprichosas, groseras, holgazanas, estúpidas?”

Cuanto más uno se cultiva, más infeliz se vuelve.
El pulgón roe las plantas; la herrumbre, el metal; la mentira, el alma.
Los médicos no son dioses.
Un hombre honesto llega a sentir vergüenza, a veces, delante de un perro.
¡Oh si la vida pudiese ser de tal forma que todo se volviese más joven y más bello!
Suba, suba usted esa escalera que llaman la Civilización, el Progreso, la Cultura; ascienda, sí, se lo aconsejo sinceramente. ¿Qué adónde sube? no tengo la menor idea.
Este cuaderno pertenece a A. P. Chéjov
Pedro Alcalde y Sergio Caballero

Información

  • Coreografía:
    Nacho Duato
  • Música:
    Pedro Alcalde / Sergio Caballero (música original) Alfred Schnitke y Piotr Ilich Chaikovski (fragmento)
  • Escenografía:
    Jaffar Chalabi
  • Diseño de vestuario:
    Carral Asociados
  • Diseño de iluminación:
    Brad Fields
  • Realización de escenografía:
    Odeón Decorados, SL
  • Realización de vestuario:
    sastrería de la CND
  • Duración:
    1 h. 5'
  • Elenco estreno:
    Francisco Lorenzo, Gentian Doda, Stein Fluijt, Joaquín Crespo, Isaac Montllor, Randy Castillo, Clyde Archer, Luisa María Arias, Sooje Watman, Ana María López, Ana Tereza Gonzaga, Yolanda Martín, Kayoko Everhart, Liuva Horta