Bailando por el mundo con Mario Galindo

¡Feliz Cumpleaños!

Mario es un bailarín nacido en Madrid. Comenzó a bailar en una escuela de su barrio pasando, en 2014 a formarse profesionalmente en la danza. Tras graduarse, en 2019 siguió estudiando en el San Francisco Ballet School. Desde 2021 forma parte de la Compañía Nacional de Danza, bajo la dirección artística de Joaquín De Luz.

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Buenos días Mario, ¿cómo estás? Felicidades por tu cumpleaños.

¡Muy bien! muchas gracias.

 

Eres de Madrid, del barrio de Vallecas ¿fue allí donde empezaste a dar tus primeros pasos?

Sí, mis comienzos tienen lugar en Vallecas, donde comencé a bailar por iniciativa propia en una pequeña escuela de ballet.

En 2014 decidiste formarte profesionalmente en la danza, ingresando en el Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma ¿Cómo fue el proceso de crecimiento como bailarín? ¿Recuerdas a algún profesor que te marcase especialmente?

Rápidamente me di cuenta de que quería hacer del ballet mi profesión. Poco a poco fui comenzando a entender de lo que este arte trataba, un proceso en el que aún me encuentro y el cual lo hace especial. No sería quien soy ni como bailarín ni como persona, sin cada uno de mis maestros y mis maestras. Algunos como Ricardo Franco sin duda han marcado un antes y un después en mí y sobretodo en mi forma de ver y entender la danza.

¿Por qué escoges la danza clásica? ¿Qué papel destacarías de tu repertorio?

Es difícil explicar por qué he elegido la danza clásica. Creo que elegí esta forma artística porque es muy afín a mis gustos en cuanto a los movimientos y nunca me aburriré con ella puesto que cada día la entiendo de una forma distinta.

Durante tu formación tuviste la oportunidad de participar en algunas competiciones, como el concurso Ribarroja de Turia donde fuiste ganador ¿Qué supuso para ti este primer éxito?

Para mí fue un reconocimiento al trabajo que llevaba haciendo un par de años atrás. Una buena experiencia que me trae buenos recuerdos.

También participaste en el Concurso Internacional de Ballet de Laussane. A pesar de no haber llegado hasta la final ¿con qué te quedas de todo el proceso? Si volvieras a presentarte ahora ¿qué cosas crees que podrías intentar mejorar?

Sin duda fue una experiencia muy provechosa en cuanto a aprendizaje de cómo funciona este mundo de la danza y no tanto a nivel dancístico. Me ayudó mucho a dar un paso adelante, comprender que la seguridad en uno mismo y valorar tu propio trabajo siendo crítico con él, es lo más importante para poder avanzar.

No repetiría la experiencia puesto que no entiendo la danza como una competición y no creo que se pueda evaluar ni mucho menos numéricamente. Mis objetivos eran distintos a ganar el concurso, eran conseguir una oportunidad para seguir dando los próximos pasos.

Te graduaste en 2019 pero decidiste seguir formándote en el San Francisco Ballet School ¿Por qué elegiste esa escuela? ¿Fue fácil la decisión de irte a estudiar al otro lado del charco?

Bueno, creo que es una escuela extraordinaria con unos muy buenos maestros, además la compañía siempre me ha gustado y pensé que sería la oportunidad perfecta para conseguir esa meta.

La decisión no fue muy difícil puesto que llevaba años concienciándome de que tendría que alejarme de mi ciudad.

Luego mi mentalidad fue cambiando, dejé de ver la necesidad de estar tan lejos de mi ciudad y mis seres queridos. La pandemia me ayudó a decidir no irme tan lejos por el momento.

 

Desde este mismo año formas parte de la Compañía Nacional de Danza, dirigida por Joaquín De Luz ¿Cómo te sientes al formar parte de ella? ¿Cómo es trabajar con Joaquín De Luz?

Me siento muy feliz de formar parte esta compañía, la cual me ha acogido estupendamente. Es curioso y extraño que habiendo vivido siempre en Madrid apenas conociera la forma de trabajo dentro de ella y nunca pensé que formaría parte de ella.

Joaquín De Luz es quien me ha dado esta oportunidad, de estar en mi ciudad viviendo de mi profesión y dar mis primeros pasos de forma profesional, comenzar mi carrera. Trabajar con él en el estudio, mano a mano, es muy gratificante y provechoso.

En la CND convives con muchos bailarines que llevan una larga trayectoria a sus espaldas ¿Son para ti tus compañeros un ejemplo al que aspirar?

Sin duda esta compañía es especial por sus bailarines, mucha diversidad cultural y dancística. Todos son un ejemplo y de cada uno intento aprender cosas que sumar a mi mochila.

Viendo el recorrido de repertorio de la Compañía ¿Qué pieza te gustaría haber bailado? ¿Cuál te gustaría bailar en el futuro?

Bueno, sin duda las obras de Nacho Duato me fascinan. En esta media temporada que llevo con la compañía he tenido la oportunidad de aprender algunas de ellas como White Darkness, las cuales me encantaría poder bailar.

Y de cara a un futuro, nada en concreto… simplemente el más variado repertorio posible, que me permita sumar lo máximo posible.

Para terminar, ¿cómo esperas celebrar tu cumpleaños?

Espero celébralo de la forma más sencilla y más especial que para mí es rodeado de mis seres más queridos.

 

MARIO GALINDO – CUERPO DE BAILE CND

 

Entrevista por: Monserrat Martínez